Denuncian la presencia de caballos con cepos en O Morrazo
La plataforma en defensa de los montes de la comarca asegura que es sencillo ver casos así por lugares como Chan de Arquiña o el monte Pornedo.
Vigo 16 de enero de 2012 13:05
La plataforma en defensa de los montes de O Morrazo ha denunciado la existencia de caballos con cepos en la zona. Según explican, esta «práctica de tortura animal» es utilizada para controlar la movilidad de los caballos y todavía se pueden ver sin dificultad en lugares como Chan de Arquiña, Chan de Xestoso, Chan de Gagán, Chan de Pedras Negras o el monte Pornedo.
Los responsables recuerdan que estas medidas pueden producir malformaciones y roturas de extremidades. Además, dificultan la movilidad de los caballos, por lo que no pueden evitar atropellos o huir de un incendio forestal. Estas situaciones, que ya han sido denunciadas con anterioridad en Galicia, son ilegales.
«Aínda que a responsabilidade destes maltratos recae directamente nos propietarios, consideramos que as administracións públicas competentes, concellos e principalmente a Xunta, non deberan tolerar nin ser permisivas con estas prácticas ilegais perseguindo e multando a aqueles propietarios e abolindo de maneira definitiva este tipo de prácticas cara ós cabalos», han puntualizado desde la comarca.
Enlace: La Voz de Galicia
Cabaleiros do Deza supedita un equipo de horseball infantil al uso de Mouriscade
El colectivo, que aglutina 121 socios, confía en que el picadero quede a disposición de todas las asociaciones equinas
2012.01.15
La presidenta del colectivo (en el centro de la mesa) dirigiéndose a los socios, ayer. // Bernabé/Gutier
BLANCA PAZ - LALÍN La presidenta de la Asociación Cabaleiros do Deza, Esperanza González, confía en lograr un acuerdo con la directiva del Club Hípico de Mouriscade para que tanto su colectivo como el de Cabaleiros de Lalín puedan hacer uso de unas instalaciones que, recordó, "son del Concello y el picadero fue hecho para el disfrute de la gente del mundo del caballo". Fue uno de los principales asuntos que abordó el colectivo en la asamblea anual que celebró ayer en el Hotel Pontiñas de Lalín. "Nuestra propuesta es la del Concello, que es bastante acertada y clara. Hay que formar un equipo para organizar, en conjunto, un proyecto para coordinar el uso de las instalaciones de Mouriscade", aclara.
Poder acceder al picadero es prioritario para materializar el proyecto que Cabaleiros do Deza se marca este año: la creación de un equipo de horseball infantil. La falta de instalaciones obliga al actual conjunto de adultos, uno de los más antiguos de Galicia, a desplazarse a Caldas de Reis, para poder realizar sus entrenamientos. "Podemos hacer una cantera importante, porque hay muchos niños en la asociación, pero si no tenemos donde realizar los entrenamientos es imposible", comenta la presidenta.
El colectivo, formado por 121 socios, analizó también ayer el estado de sus cuentas así como las ofertas presentadas por herradores y suministradores de pienso y varios cambios efectuados por parte de su compañía aseguradora. Por otro lado, se expuso el calendario de rutas para 2012 que iniciarán el día 22 con la asistencia a la Matanza do Porco en Donramiro y continuarán el 12 de febrero con la Feira do Cocido. También harán las rutas a Zobra y Arzúa en marzo, a Acibeiro en abril y a la Feira dos Carballiños en mayo, mes en el que disputarán la liga de horseball.
Poder acceder al picadero es prioritario para materializar el proyecto que Cabaleiros do Deza se marca este año: la creación de un equipo de horseball infantil. La falta de instalaciones obliga al actual conjunto de adultos, uno de los más antiguos de Galicia, a desplazarse a Caldas de Reis, para poder realizar sus entrenamientos. "Podemos hacer una cantera importante, porque hay muchos niños en la asociación, pero si no tenemos donde realizar los entrenamientos es imposible", comenta la presidenta.
El colectivo, formado por 121 socios, analizó también ayer el estado de sus cuentas así como las ofertas presentadas por herradores y suministradores de pienso y varios cambios efectuados por parte de su compañía aseguradora. Por otro lado, se expuso el calendario de rutas para 2012 que iniciarán el día 22 con la asistencia a la Matanza do Porco en Donramiro y continuarán el 12 de febrero con la Feira do Cocido. También harán las rutas a Zobra y Arzúa en marzo, a Acibeiro en abril y a la Feira dos Carballiños en mayo, mes en el que disputarán la liga de horseball.
Enlace: Faro de Vigo
Valoran en 960 euros los cuatro caballos que permanecen retenidos en Requián
Tras el informe veterinario, este sería el precio de salida por el grupo de équidos en caso de subasta
2012.01.14
ANA CELA - A ESTRADA El edil de Medio Rural, el también primer teniente de alcalde Juan Constenla, dio a conocer ayer la valoración económica de los cuatro caballos retenidos por vecinos de Requián desde el pasado 28 de diciembre. El concejal explicó que, una vez efectuado el correspondiente informe veterinario, el precio marcado por los cuatro animales se fijó en 960 euros, cuantía que determinará también el precio de salida en el caso de que llegue a celebrarse una nueva subasta pública en el lugar.
Esta sería la solución que, siguiendo el reglamento para estos casos, se adoptaría si el propietario de los animales no los reclama. Después de apresar y retener a los équidos, los vecinos pusieron la situación en conocimiento del ayuntamiento para que iniciase el correspondiente expediente, al objeto de localizar al propietario de este grupo de animales, carentes de identificación. El Concello pidió a agentes de la Policía Local que se desplazasen hasta Requián, en la parroquia de Frades, para realizar un informe. Fuentes vecinales explicaron que estos mismos caballos les venían ocasionando daños en sus fincas desde hacía "más de dos meses", por lo que resolvieron reunirse para capturar a los équidos y conducirlos hasta un corral, donde los habitantes de la zona se encargan de su cuidado y manutención.
Juan Constenla explicó que la intención del Concello es publicar durante la próxima semana anuncios en los que establecer un plazo para que el propietario o propietarios de estos equinos puedan reclamarlos, asumiendo los daños causados a los vecinos para poder recuperarlos. En este sentido, el titular del departamento municipal de Medio Rural avanzó que la intención del Concello es, en la medida de lo posible, intentar acortar los plazos, bajo la pretensión de agilizar el proceso y evitar perjuicios a los vecinos, teniendo en cuenta el gasto y el trabajo que representa el cuidado y la manutención de este ganado. Ello hace pensar que los 15 días inicialmente previstos de plazo a partir de las publicaciones en prensa podrían verse reducidos. La subasta pública de los équidos se realizaría en Casalpaio al día siguiente de que concluya el plazo de reclamación establecido por el ayuntamiento.
El problema con el ganado mostrenco y las subastas públicas de caballos no constituyen ya una novedad en Requián. La última se celebró a mediados de octubre de 2010. En esa ocasión se subastaron 12 équidos, también apresados por los vecinos. Tras el informe veterinario, el precio de salida por el grupo se estableció en 4.700 euros. Hubo una segunda y una tercera ronda sin que se presentase ninguna oferta.
Esta sería la solución que, siguiendo el reglamento para estos casos, se adoptaría si el propietario de los animales no los reclama. Después de apresar y retener a los équidos, los vecinos pusieron la situación en conocimiento del ayuntamiento para que iniciase el correspondiente expediente, al objeto de localizar al propietario de este grupo de animales, carentes de identificación. El Concello pidió a agentes de la Policía Local que se desplazasen hasta Requián, en la parroquia de Frades, para realizar un informe. Fuentes vecinales explicaron que estos mismos caballos les venían ocasionando daños en sus fincas desde hacía "más de dos meses", por lo que resolvieron reunirse para capturar a los équidos y conducirlos hasta un corral, donde los habitantes de la zona se encargan de su cuidado y manutención.
Juan Constenla explicó que la intención del Concello es publicar durante la próxima semana anuncios en los que establecer un plazo para que el propietario o propietarios de estos equinos puedan reclamarlos, asumiendo los daños causados a los vecinos para poder recuperarlos. En este sentido, el titular del departamento municipal de Medio Rural avanzó que la intención del Concello es, en la medida de lo posible, intentar acortar los plazos, bajo la pretensión de agilizar el proceso y evitar perjuicios a los vecinos, teniendo en cuenta el gasto y el trabajo que representa el cuidado y la manutención de este ganado. Ello hace pensar que los 15 días inicialmente previstos de plazo a partir de las publicaciones en prensa podrían verse reducidos. La subasta pública de los équidos se realizaría en Casalpaio al día siguiente de que concluya el plazo de reclamación establecido por el ayuntamiento.
El problema con el ganado mostrenco y las subastas públicas de caballos no constituyen ya una novedad en Requián. La última se celebró a mediados de octubre de 2010. En esa ocasión se subastaron 12 équidos, también apresados por los vecinos. Tras el informe veterinario, el precio de salida por el grupo se estableció en 4.700 euros. Hubo una segunda y una tercera ronda sin que se presentase ninguna oferta.
Critican la "pasividad" de la Administración ante el maltrato a los caballos con cepos
La Comunidad de Montes de Xeve denuncia el daño que provocan en las plantaciones
2012.01.13 08:12
Un caballo con sus patas delanteras atadas con una cuerda para limitar sus movimientos. // Gustavo Santos
C. GARCÍA - PONTEVEDRA La Comunidad de Montes de Santa María de Xeve criticó ayer la "pasividad" de las administraciones ante el problema que supone la presencia de caballos con cepos en los montes de las parroquias pontevedresas. Concretamente, el pasado fin de semana la organización ecologista "Libera" denunció el avistamiento de un ejemplar portando dos "trancas", artefactos que son ilegales y que causan daño a los animales limitando de forma importante sus movimientos.
Los comuneros expresaron esta crítica en una carta abierta a la organización "Libera" agradeciendo el interés de este colectivo por denunciar "el maltrato a los animales en los montes vecinales".
Recuerdan que las comunidades de montes de Pontevedra "venimos denunciando desde hace tiempo este problema con el objeto de darle una solución". Explican que mantuvieron múltiples reuniones con la Xunta de Galicia (entre ellos el director xeral de Montes, el jefe territorial de Medio Rural en Pontevedra, el jefe de servicio de Montes, entre otros) pero que, pese a ello, "no obtuvimos apoyo alguno". También se pusieron en contacto con el Concello de Pontevedra "que tiene unas competencias que datan del año 1905 que son impracticables a día de hoy". En los casos en los que pusieron en práctica la posibilidad que les brinda esta antigua ley, la captura y subasta de los animales, tampoco fueron capaces de resolver el problema.
Los comuneros explican que también intentaron buscar una salida al problema a través de negociaciones directas con la Asociación de Gandeiros do Monte Acibal "proponiéndoles el desarrollo de un proyecto conjunto para la gestión del ganado con cierres que permitan la coexistencia de los animales, su mantenimiento en un estado correcto y las plantaciones forestales que realizan las comunidades de Montes". No obstante, aseguran que "la respuesta no pudo ser más arrogante y despreciativa: no vamos a encerrar a nuestros animales". Afirman que los caballos no respetan los cierres construidos para proteger las reforestaciones y que muchas de las plantaciones acabaron "destrozadas por los animales". "No queremos que se olvide que estos caballos tienen dueños que se benefician del maltrato a los animales y de la inactividad de la administración". Aseguran que los agentes forestales, que "conocen el problema" no denuncian y que el Seprona ya no acude a sus llamadas: "¿para qué?, nos responden".
También dicen alegrarse por saber "que hay asociaciones ecologistas que lejos de apoyar a las asociaciones de ganaderos en una supuesta defensa de la raza, deciden defender a los animales" y añaden que los comuneros "estaríamos encantados de colaborar con los ganaderos en la defensa de los animales ya que el monte puede beneficiase mucho de la presencia controlada de éstos".
Los comuneros expresaron esta crítica en una carta abierta a la organización "Libera" agradeciendo el interés de este colectivo por denunciar "el maltrato a los animales en los montes vecinales".
Recuerdan que las comunidades de montes de Pontevedra "venimos denunciando desde hace tiempo este problema con el objeto de darle una solución". Explican que mantuvieron múltiples reuniones con la Xunta de Galicia (entre ellos el director xeral de Montes, el jefe territorial de Medio Rural en Pontevedra, el jefe de servicio de Montes, entre otros) pero que, pese a ello, "no obtuvimos apoyo alguno". También se pusieron en contacto con el Concello de Pontevedra "que tiene unas competencias que datan del año 1905 que son impracticables a día de hoy". En los casos en los que pusieron en práctica la posibilidad que les brinda esta antigua ley, la captura y subasta de los animales, tampoco fueron capaces de resolver el problema.
Los comuneros explican que también intentaron buscar una salida al problema a través de negociaciones directas con la Asociación de Gandeiros do Monte Acibal "proponiéndoles el desarrollo de un proyecto conjunto para la gestión del ganado con cierres que permitan la coexistencia de los animales, su mantenimiento en un estado correcto y las plantaciones forestales que realizan las comunidades de Montes". No obstante, aseguran que "la respuesta no pudo ser más arrogante y despreciativa: no vamos a encerrar a nuestros animales". Afirman que los caballos no respetan los cierres construidos para proteger las reforestaciones y que muchas de las plantaciones acabaron "destrozadas por los animales". "No queremos que se olvide que estos caballos tienen dueños que se benefician del maltrato a los animales y de la inactividad de la administración". Aseguran que los agentes forestales, que "conocen el problema" no denuncian y que el Seprona ya no acude a sus llamadas: "¿para qué?, nos responden".
También dicen alegrarse por saber "que hay asociaciones ecologistas que lejos de apoyar a las asociaciones de ganaderos en una supuesta defensa de la raza, deciden defender a los animales" y añaden que los comuneros "estaríamos encantados de colaborar con los ganaderos en la defensa de los animales ya que el monte puede beneficiase mucho de la presencia controlada de éstos".
Los comuneros proponen zonas cerradas para los caballos
El proyecto fue rechazado por la asociación de ganaderos del Acibal
pontevedra / la voz 13 de enero de 2012 05:00
Caballos de monte retenidos en el campo de fútbol
de Saiar, en Caldas, en el 2009. MONICA FERREIRÓS
La Comunidade de Montes
de Santa María de Xeve y la Mancomunidade de Montes de Pontevedra acaban de
remitir una carta abierta a la Asociación Animalista Libera en la que le
agradecen su interés por denunciar el maltrato animal en los montes vecinales.
El colectivo había trasladado hace unos días a la Fiscalía la existencia de al
menos dos caballos con cepos en las patas en una zona de la parroquia de Santa
María de Xeve.
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| Caballos de monte retenidos en el campo de fútbol de Saiar, en Caldas, en el 2009. MONICA FERREIRÓS |
La Comunidade de Montes
de Santa María de Xeve y la Mancomunidade de Montes de Pontevedra acaban de
remitir una carta abierta a la Asociación Animalista Libera en la que le
agradecen su interés por denunciar el maltrato animal en los montes vecinales.
El colectivo había trasladado hace unos días a la Fiscalía la existencia de al
menos dos caballos con cepos en las patas en una zona de la parroquia de Santa
María de Xeve.
En esa misiva, los
comuneros del municipio desvelan que para atajar el problema que representan
los equinos salvajes intentaron una «negociación directa» con la asociación de
ganaderos del monte Acibal. En concreto, propusieron el desarrollo de un
proyecto conjunto para la gestión del ganado con cierres que permitan la
coexistencia de los animales, su mantenimiento en correcto estado y las
plantaciones forestales que realizan las comunidades de montes.
«A resposta non puido
ser máis arrogante e despreciativa: non imos pechar os nosos animais», recogen
los comuneros en la carta. Añaden que tampoco respetan los cierres hechos para
proteger las plantaciones. Como ejemplo citan que las primeras plantaciones que
realizó la Comunidade de Montes de Santa María de Xeve en zonas puntuales con
cierres «foron, logo de romper estes os seus donos, destrozadas polos animais».
Los comuneros subrayan
que los caballos de monte tienen dueños, que «se benefician do maltrato dos
animais e da inactividade da Administración». Tampoco se libran de sus críticas
los agentes forestales y el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona)
de la Guardia Civil. «Os axentes forestais coñecen o problema, veno cando van
ao monte e non denuncian, ¿por que? Chamamos ao Seprona e xa non acude, para
que, dinnos», señalan.
Los comuneros aplauden
que existan asociaciones ecologistas que «lonxe de apoiar ás asociacións de
gandeiros nunha suposta defensa da raza, defenden aos animais». Las comunidades
afirman que estarían encantadas de colaborar con los ganaderos en la defensa de
los equinos, ya que el monte puede beneficiarse mucho de la presencia
controlada de los animales. «Conviría que a Administración administrara e que
as autoridades demostraran que o son, tamén no monte veciñal e algunha vez, a
favor del», remachan en la misiva remitida a Libera.
La Mancomunidade de
Montes mantuvo en su día reuniones con el director xeral de Montes, el jefe
territorial de Pontevedra y el jefe del servicio de Montes «e non obtivemos
apoio ningún». También se entrevistaron con el Concello, pero «non deron
resolto o problema».
Viladesuso expulsa a los caballos de su monte
La decisión responde a la "falta de seguridad" tras aparecer roto el cierre que acota a 100 equinos y a 50 vacas en 130 hectáreas
Dos trabajadores de la comunidad de montes reparaban ayer uno de los portales del cierre roto. // N.P.
NELI PILLADO - OIA Los ganaderos de la comarca miñorana que dispongan de caballos en las 500 hectáreas de monte de la parroquia de Viladesuso, en Oia, tendrán que llevarse sus reses a otra parte antes de que termine esta semana. Así se lo exige la comunidad de montes de la zona por razones de "seguridad". El recinto habilitado por los comuneros para el desarrollo de un proyecto de explotación de carne ecológica sufrió el pasado fin de semana un nuevo atentado y el cierre metálico quedó destrozado en varios tramos, por lo que el ganado que pastaba en su interior puede salir de la zona acotada y causar accidentes de tráfico o destrozos en fincas particulares.
Un centenar de equinos criados en libertad y unas cincuenta vacas pastan en el recinto, pero son los caballos –también denominados "burras" – los que comportan más riesgos, según explica el presidente de la comunidad de montes de Viladesuso, Rafael Lomba, quien comunicó el lunes a los ganaderos que debían desalojar a las reses de los montes de la parroquia. "Lo lamentamos mucho, pero tenemos que pedirles que los retiren porque se trata de una cuestión de seguridad pública. Nosotros tenemos que velar por los intereses de la comunidad y sin un cierre en condiciones no podemos garantizar la seguridad de los vecinos, sus propiedades y las personas que pasen por aquí con sus vehículos", explica.
Microchip necesario
Lomba insiste en que los comuneros son los responsables últimos de los daños que puedan causar los animales, en caso de que no aparezcan sus dueños o no se encuentren debidamente identificados, porque habitan en sus terrenos. El asunto recuerda la polémica del microchip que la Xunta pretende implantar en los animales para asegurar su identificación, un dispositivo que los comuneros consideran "necesario" para dirimir responsabilidades en caso de incidencias.
En cualquier caso, señala Lomba, la expulsión de los caballos es provisional. En cuanto se repare el cierre, las investigaciones permitan dar con los responsables de su ruptura y se pueda garantizar que las "burras" vuelvan al monte de forma segura, regresarán.
Las vacas podrán quedarse porque su movilidad es menor. El presidente de la asociación de ganaderos de vacuno de la zona, Eugenio Portela, asegura que los dueños de las reses acuden cada día a la zona para controlarlas.
Mientras tanto, los propietarios se preparan para conducir este sábado a los caballos a otros lugares. Lo difícil será lograr que no regresen a sus pastos de origen, según explican ganaderos del entorno, dispuestos a cumplir con las exigencias de la comunidad de montes de Viladesuso, aunque no las compartan. El presidente de la asociación de ganaderos de caballos de A Groba, Modesto Domínguez, espera que la situación no se extienda a otras sociedades mancomunadas, ya que "podría provocar una auténtica guerra entre comuneros y propietarios de caballos".
Un centenar de equinos criados en libertad y unas cincuenta vacas pastan en el recinto, pero son los caballos –también denominados "burras" – los que comportan más riesgos, según explica el presidente de la comunidad de montes de Viladesuso, Rafael Lomba, quien comunicó el lunes a los ganaderos que debían desalojar a las reses de los montes de la parroquia. "Lo lamentamos mucho, pero tenemos que pedirles que los retiren porque se trata de una cuestión de seguridad pública. Nosotros tenemos que velar por los intereses de la comunidad y sin un cierre en condiciones no podemos garantizar la seguridad de los vecinos, sus propiedades y las personas que pasen por aquí con sus vehículos", explica.
Microchip necesario
Lomba insiste en que los comuneros son los responsables últimos de los daños que puedan causar los animales, en caso de que no aparezcan sus dueños o no se encuentren debidamente identificados, porque habitan en sus terrenos. El asunto recuerda la polémica del microchip que la Xunta pretende implantar en los animales para asegurar su identificación, un dispositivo que los comuneros consideran "necesario" para dirimir responsabilidades en caso de incidencias.
En cualquier caso, señala Lomba, la expulsión de los caballos es provisional. En cuanto se repare el cierre, las investigaciones permitan dar con los responsables de su ruptura y se pueda garantizar que las "burras" vuelvan al monte de forma segura, regresarán.
Las vacas podrán quedarse porque su movilidad es menor. El presidente de la asociación de ganaderos de vacuno de la zona, Eugenio Portela, asegura que los dueños de las reses acuden cada día a la zona para controlarlas.
Mientras tanto, los propietarios se preparan para conducir este sábado a los caballos a otros lugares. Lo difícil será lograr que no regresen a sus pastos de origen, según explican ganaderos del entorno, dispuestos a cumplir con las exigencias de la comunidad de montes de Viladesuso, aunque no las compartan. El presidente de la asociación de ganaderos de caballos de A Groba, Modesto Domínguez, espera que la situación no se extienda a otras sociedades mancomunadas, ya que "podría provocar una auténtica guerra entre comuneros y propietarios de caballos".
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